20 noviembre 2013

LOS DERECHOS HUMANOS TU MEJOR INSTRUMENTO

Los alumnos de Vega del Codorno han celebrado el día de los derechos de los niños con esta fabulosa canción.

17 noviembre 2013

EDUCAR ES EMOCIONAR

Francisco Mora, doctor en Neurociencias, experto en neuroeducación


Parece difícil despertar el entusiasmo
en las aulas.
No me cansaré de insistir: sólo
se puede aprender aquello
que se ama.
La llave es la emoción.
Sí, la capacidad de interactuar con el mundo
a partir de la curiosidad. El problema es que
no tenemos maestros preparados. El maestro
es el alma de lo que puede ser un pueblo
y hay que infundirle lo que es una realidad
hoy: que es un mago con varita mágica para
transformar el cerebro de los niños.
Demasiada responsabilidad.
Un maestro transforma la física, la química,
la anatomía, la fisiología del niño. Transforma
su cerebro para bien y para mal. Y si no
lo sabe, si no es responsabley no está formado
para ello, no puede emocionarlo.
La emoción se transmite.
Así es, y nada que no pase por la emoción
nos sirve en nuestro aprendizaje. Hay que
abrir a los niños la puerta de la curiosidad.
Hay que empezar la clase despertándolos.
Deben mirarte con los ojos muy abiertos.
Aunque tengas que llevarte una jirafa a la
clase, pero se trata de que digan: “¡Ohhh!”...
Un maestro así, lo recuerdas.
La curiosidad es la única llave que abre la
atención, que es la puerta del conocimiento.
No puedes decirle a un niño: “¡Presta atención!
¡Caramba!”.
¿Es lo que nos enseña la neurociencia?
Efectivamente, y tantas cosas que hay que
tener en cuenta, como los ritmos circadianos
(los momentos álgidos de la atención
del niño para optimizar la educación), hasta
cómo influye la arquitectura del colegio.
Cuénteme.
Hoy sabemos que un aula con grandes ventanales,
bien ventilada, con una adecuada
temperatura y con luz natural produce mejores
rendimientos.
Igual es mucho pedir.
Esos cerebros infantiles están creando más
de 100.000 millones de contactos sinápticos
por minuto. En buenas condiciones serán
más listos y más sanos.
¿Y más felices?
El cerebro no está diseñado para que seamos
felices, sino para sobrevivir, pero lo que
sí es responsabilidad nuestra es haber instrumentalizado
y creado una vida de estrés.
¿Demasiadas horas de colegio, deberes
y extraescolares?
Estamos ahogándolos. Los niños hasta losocho años deberían estar jugando, porque
el juego es el disfraz del aprendizaje.
Y lo es también a los 20 y a los 50.
Sin duda alguna, de adultos lo que hacemos
cuando podemos es huir de nuestra conciencia,
que nos atenaza y esclaviza, y lo hacemos
jugando o viendo jugar. Pero cuando
tienes que cimentar lo que será el mundo
adulto, hay que potenciarlo.
Juego y aire libre.
El ejercicio físico es el responsable de la
creación de nuevas neuronas, y es fundamental
practicarlo de niñopara ser un adulto
sano. Nos hemos construido a lomos de
nuestra espalda y nuestros músculos, pero
ahora nos hemos hecho sedentarios, que es
lo antagónico a lo que hay escrito en nuestro
programa genómico y lo que crea las enfermedades
en nuestro organismo.
¿Cómo ayudarles a aprender?
Enseñar significa emocionar, evocar su
atención desde dentro, y es posible instrumentar
cómo empezar una clase: hay que
ser provocador, hay que inyectar curiosidad
en relación con la edad, la hora del día,
el estado del organismo.
No es baladí.
A Magisterio no puede ni debe entrar todo
el mundo, hay que afinar quién tiene capacidad
para enseñar. Todo empieza por el
maestro.
En la adolescencia andan distraídos.
El cerebro de un púber no sólo no ha madurado
en las áreas que tienen que ver con la
creación de valores y normas, sino que se le
están muriendo células a montones porque
se está reajustando a lo que es la adultez.
Hay cosas que un maestro debe saber, porque
si las conoce, podrá ser flexible y sabrá
cómo sacar partido a esos cerebros.
Ilumínenos, doctor.
La adolescencia es la edad del altruismo si
lo sabes encauzar, del heroísmo: todos los
héroes han sido adolescentes. Captar eso y
encauzarlo es alimentar esos cerebros.
Un ejemplo, por favor...
“Vamosa perder la vida porque los niños de
África tengan agua”... Hay quien es capaz
de hacerles vivir eso, a un adulto ya no. La
adolescencia es una edad muy moldeable.
Ordenemos las etapas del desarrollo cerebral.
Mientras se es niño hay que jugar, conocer
el mundo de primeramano, ver la hoja en el
árbol, trabajar lo sensorial, lo que te entra
por los órganos de los sentidos. Si los metes
en una guardería entre cuatro paredes, los
estás ahogando.
Pues cada vez se les ahoga antes.
Apartir de los nueve años empieza el pensamiento
abstracto, jugar con ideas entendiendo
que somos seres fundamentalmente
emocionales: no hay nada de lo que yo piense,
razone o decida que no tenga una base
emocional. No hay razón sin emoción.
IMA SANCHÍS

14 noviembre 2013

BROCHETAS DE OTOÑO

Aprovechando la estupenda fruta que podemos disfrutar en el Otoño, los compañeros de Vega del Codorno hemos lavado, pelado y cortado la fruta para saborear estas estupendas brochetas. Están buenísimas y además las hemos hecho solitos.

05 noviembre 2013

VÍSPERAS DE TODOS LOS SANTOS

En la localidad de Villalba de la Sierra, los alumnos han hecho un broche de una calabaza para conmemorar la víspera de todos los santos.